martes, 29 de enero de 2013

Analisis sobre la consulta. Publicado en Zonasec 29.1.2013 "des de Buenos Aires". http://zonasec.cat/entitats/des-de-buenos-aires


Des de Buenos Aires

Des de l’altre costat de l’Atlàntic, tenim una sensació estranya després que sortís com finalment va sortir la declaració de sobirania. Ens ha deixat un gust semblant al d’un caramel que, tot i que al començament és dolç, al final deixa una essència amarga. I, aquest toc amarg molesta a la dolçor de la primera mossegada.

Des del Casal de Catalunya de Buenos Aires, el més antic del món, estàvem molt il·lusionats que sortiria ben aviat una declaració que ens posicionés amb l’anhel de lluitar per una consulta en què definim què volem ser i com volem viure.

Hem d’admetre que ens va deixat perplexes el purisme de la CUP. Crèiem que en un moment on el que es discuteix és el poder per exercir el dret a decidir, dret democràtic per excel·lència, i amb Madrid pressionant perquè seguim fent el que vol, no podem caure en aquestes temptacions. I d’això es tracta. De poder decidir. Volem una llei nova on siguem adults per decidir sobre els nostres interessos, la nostra economia, la nostra educació i tot això des de la nostra història i tarannà.

D’altra banda, la votació va ajudar a prendre consciència que el PSC és una filial de Madrid. Les referències constants a la legalitat són una excusa per no assumir que volen seguir amb Espanya. El es que percep és que no podran frenar a les seves bases i que la decisió aviat els portarà una divisió interna perquè a les bases socialistes hi ha catalans que pensen en clau sobiranista.

Per concloure vull tornar al gust dolç del començament. Es va aconseguir votar afirmativament la declaració sobiranista. Ara ens queda ajudar empentar la classe política. Cal que els dirigents deixin al marge els seus interessos i pensin més en Catalunya com a nació. Cal que es posin d’acord i s’aconsegueixi, efectivament, la consulta.

domingo, 27 de enero de 2013

¿Qué paso con la idenpendecia? publicado en perfil 26.1.2013. http://www.perfil.com/ediciones/2013/1/edicion_749/contenidos/noticia_0028.html

El proceso político vivido en la sociedad catalana es más complejo de lo que se preveía. Viven una pluralidad ideológica sana, y el compromiso democrático se notó en el aumento de la participación de las últimas elecciones, que llegó a un 69,89%.
 
El primer error en la lectura de los resultados de las elecciones fue de los medios de Madrid, que la tildaron de soberanista y dijeron que el planteo independentista fracasó. Es necesario recalcar que lo primero que se votó fue un gobierno autonómico en Cataluña por cuatro años y en segundo término, medir las fuerzas para solicitar una consulta sobre la independencia.
 
El partido de gobierno CiU (coalición de derecha) bajó su representación en el Parlament de 62 escaños a cincuenta. El president Mas buscó esconder bajo un discurso nacionalista una gestión de recortes como único criterio para salir de la crisis de Europa: la sociedad no le creyó y por ello votó así.
 
La segunda fuerza, Esquerra Republicana de Catalunya, pasó de diez diputados a 21. Este partido fue crítico a las opciones de recortes y de una línea soberanista bien definida.
 
El gran perdedor fue el Partido Socialista de Catalunya, que de segunda fuerza paso a tercera y perdió ocho diputados. El PSC está en crisis por la pérdida de las elecciones nacionales y una discusión interna que no se termina de definir entre unionistas y soberanistas. Se comprometieron a apoyar el derecho a decidir, es decir, una consulta, algo que no cumplieron.
 
De los dos partidos claramente españolistas, el Popular ganó un diputado y Ciutadans duplicó los tres que tenía. En la izquierda, el ICV-EUiA pasa de diez a 13 diputados y CUP alternativa de izquierda entra con tres.
 
En conclusión, en las elecciones de noviembre hubo un claro castigo a las acciones impulsadas de corte liberal por el presidente Mas que, a pesar de ello, volvió a formar gobierno. En relación con la convocatoria a elecciones que se hizo hace dos años, podemos decir que en porcentajes el soberanismo alcanzó el 68% y el 32% una opción españolista o unionista.
 
Y ahora… la consulta por el derecho a decidir.
 
No hay que olvidarse que se está planteando un proceso que tiene como fin llegar a ser un nuevo estado de Europa por las vías democráticas y no bélicas. Este hecho no es frecuente, ya que habitualmente se llega a una independencia luego de una lucha encarnizada, una intervención internacional y luego una posible consulta.
 
Los ánimos aquí son otros, es lograr un consenso mayoritario entre los distintos bloques de diputados para solicitar que se pueda realizar una consulta basada en el “derecho a decidir”. Se sabe que desde Madrid y desde los partidos españolistas hay una clara búsqueda de artilugios para recurrir a lo legal (Superior Tribunal Español) ya que no tienen la mayoría de votos. De suceder esto, nos encontraríamos con una de las falacias de la democracia; se pierde en las urnas, pero se intenta ganar haciendo lobby. Es muy probable que Catalunya tenga que recurrir a estamentos internacionales para poder hacer legal el derecho a decidir sobre su futuro mediante una consulta.
 
El miércoles 23 se logró votar un texto donde lo central fue: “El pueblo de Cataluña tiene, por razones de legitimidad democrática, carácter de sujeto político y jurídico soberano” y fue aprobado por 85 diputados de 135, es decir, por el 63% del Parlamento.
 
El segundo punto, referido al principio de “legalidad democrática”, introduce que la voluntad popular expresada democráticamente por la sociedad catalana “será la garante fundamental del derecho a decidir”.
 
En consecuencia, este punto indica textualmente que “el proceso del ejercicio del derecho a decidir será escrupulosamente democrático, garantizando especialmente la pluralidad de opciones y el respeto a todas ellas, a través de la deliberación y diálogo en el seno de la sociedad catalana, con el objetivo de que el pronunciamiento que resulte sea la expresión mayoritaria de la voluntad popular, que será la garante fundamental del derecho a decidir”.
 
Con esta situación quedó claro cómo se posiciona el arco político en Cataluña, donde se perciben dos bloques, un bloque nacionalista catalán y un grupo de diputados que nacieron en Cataluña que defienden un estado español. Creo que esta declaración ayudó a dividir las aguas y dejar manifiesto de qué lado se está parado.